La vicepresidenta Kamala Harris puede que no tenga la oportunidad de debatir nuevamente con el expresidente Donald Trump, pero el miércoles se enfrentó a un desafío en forma de entrevista con Bret Baier. Este encuentro se tornó conflictivo casi desde el inicio, estableciendo un tono intenso que capturó la atención de muchos espectadores.
Baier, reconocido como el presentador político principal de Fox News, no dudó en presionar a la candidata presidencial demócrata sobre una variedad de temas polémicos, que incluyen la inmigración y el apoyo gubernamental a las cirugías de transición de género. Estas cuestiones se alinean estrechamente con los ataques habituales que Trump lanza contra ella, lo que hizo que la entrevista fuera aún más relevante en el contexto político actual.
En un momento particularmente tenso, Baier cuestionó a Harris sobre si consideraba “estúpidos” a los seguidores de Trump. Ella, con firmeza, respondió: “Nunca diría eso del pueblo estadounidense”, defendiendo así su respeto por los ciudadanos, independientemente de sus inclinaciones políticas. En otra parte de la conversación, Baier le preguntó si tenía la intención de disculparse con la madre de una niña de 12 años de Texas que fue asesinada; un caso que Trump menciona frecuentemente, ya que dos inmigrantes venezolanos recientes han sido acusados del crimen.
El enfoque agresivo de Baier se alineó con el tipo de cobertura crítica que a menudo se encuentra en la programación diaria de Fox News, lo que llevó a muchos telespectadores a preguntarse cómo respondería Harris al ser confrontada de manera tan directa y personal. Sin embargo, en varias ocasiones, Baier no permitió que Harris desarrollara sus respuestas completamente. Con un gesto de frustración, interrumpió sus explicaciones después de apenas unos segundos. Desde el primer medio minuto del intercambio, quedó claro que la intención de Baier era mantener el control de la conversación, desafiando a la vicepresidenta en cada oportunidad que se le presentaba.